domingo, 13 de febrero de 2011

¿Cuál es la universidad que reclaman y buscan hoy los estudiantes que ingresan a la universidad?

Los siguientes fragmentos son tomados de la página de Internet: http://www.neuronilla.com. La página difunde interesantes textos para su lectura. Dejo a consideración de nuestros lectores los siguientes párrafos sobre una pregunta que plantean hoy los estudiantes universitarios: ¿Qué universidad queremos y cómo vamos a contribuir para que sea posible? La última pregunta es del editor del blogs.



¿De qué están llenas las universidades?...

Nuestras instituciones universitarias e institutos siguen llenos de profesores cuya función principal se limita a transmitir, transferir, enseñar o explicar; en suma, a repetir las mismas informaciones recibidas en los libros, sin tomar conciencia de que pueden conseguirse con estrategias y escenarios mucho más atractivos, interesantes y útiles. Pero lo que hay que remover no es tanto la práctica cuanto la visión positivista y fragmentada del conocimiento que subyace. Se hace necesario desarrollar otra conciencia de la formación acorde con los avances de una sociedad que ha evolucionado en información y conocimiento.¿Qué podemos pensar de la siguiente imagen?...



¿Qué crisis están viviendo?...

No es posible referirnos a la enseñanza superior al margen del movimiento mundial sobre la necesidad de cambiar sus contenidos y modelos. La educación en general y la universitaria en particular están viviendo una crisis de adaptación a las nuevas demandas sociales, a la imparable influencia de las nuevas tecnologías en el trabajo y en las relaciones personales, a los avances de los nuevos conocimientos científicos provenientes de la biología, neurociencia y física cuántica principalmente. Durante la última década, el panorama de la enseñanza ha cambiado radicalmente, querámoslo o no. La convergencia europea y los nuevos Planes de estudio a la luz del Plan Bolonia son una muestra de esa realidad. Dentro de unos años se convertirá en referente para otras muchas universidades y países iberoamericanos, salvo que el Plan fracase por falta de recursos.

¿Qué deben ofrecer hoy las universidades?...



Planes de estudio basados en el desarrollo de competencias y no solo de conocimientos, como es habitual aún en muchos sistemas educativos. Ello representa un cambio fundamental en el aprendizaje haciendo hincapié en las tareas del alumno más que en las explicaciones docentes. La competencia implica adquisición de conocimientos, habilidades y valores. Las nuevas tecnologías son una herramienta para el aprendizaje.

Mejorar la metodología docente. Una metodología basada en la autonomía del alumnado, en la interacción profesor-alumno, en la implicación y en estrategias innovadoras y creativas. La creatividad cobra una mayor relevancia tanto en los procesos de enseñanza-aprendizaje como en la evaluación. Se destacan los espacios dialógicos y los nuevos escenarios de enseñanza aprendizaje fuera del aula.

Se debe trabajar con grupos más reducidos, aumentando la atención e implicación del alumnado en los procesos globales de su formación.

La evaluación se debe realizar tomando en consideración varios criterios como pruebas, trabajos, presentaciones, actividades prácticas, destacando los procesos de mejora y logros, y no sólo los resultados de un examen.

Unir los procesos de docencia, proyección e investigación, separados por el excesivo academicismo y aislamiento de las demandas sociales.

¿Qué debe hacer la universidad para mejorar y salir de la crisis?



"Una de las principales ventajas, será la renovación de la metodología docente, forzando a los docentes a reflexionar sobre qué competencias consideran que son más importantes que desarrollo en los estudiantes y orientando su actividad en dicho sentido. Por otra parte, es de esperar que debe fomentar en los estudiantes una mayor capacidad de: 1) afrontar y resolver problemas concretos; 2) defender sus ideas en público; 3) trabajar en equipo y desarrollar habilidades de coordinación y liderazgo. En otros términos es de esperar que pueda fomentar en mayor medida habilidades creativas”.

¿Se resiste la universidad al cambio?

Estas consideraciones y aportaciones nos invitan a plantear una nueva mirada sobre la enseñanza universitaria con base a estrategias innovadoras y creativas. Pero la gran dificultad para avanzar en este camino viene de la resistencia al cambio. Son muchos los que hablan de las ventajas de lo nuevo, pero prefieren seguir con lo conocido. Nada mejor que un ejemplo para ilustrar esta inercia al cambio, explicada por ciertos patrones de conducta interiorizados.

¿Qué piensan los jóvenes universitarios del ITP?



Muchas cosas buenas. Están creando una nueva generación que piensan en lo superior y para lo superior. Evolucionan hacia la mayoria de edad, se piensa a si mismos y busca estrategias que ayudan a configurar un proyecto común de avanzada para la formación de universitarios que requiere el Putumayo. Como toda organización de humanos, estos se mueven hacia el cambio, hacia la transformación total de sus estructuras y sus ideales. Encuentran un nuevo camino de ruta y trayectoria. Los jóvenes se enamoran más del quehacer universitario y se comprometen en un proyecto liberador de sus conciencias. Los jóvenes son sentipensantes y actuantes. Buscan respuestas verdaderas a las mentiras de los gobernantes de turno en el departamento.

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Autor: Saturnino de la Torre
Fecha de publicación en Neuronilla: 13 / 01 / 2010
Extraído de: http://www.revista.unam.mx/index_dic09.htm

1 comentario:

Lluís Barberà i Guillem dijo...

Queridos internautas,

Ahora tengo casi 42 años y cuando estudiaba el segundo curso de Magisterio en la Universitat de València (1992-1993), tuvimos, la mitad de la clase de la especialidad Humanas (la que yo estudiaba)una maestra de filosofía que no nos hizo ningún examen.

Simplemente comentábamos temas de actualidad, leíamos noticias que estaban a la orden del día y, además, hacíamos trabajos en grupo.

Éramos doce alumnos, más o menos, del turno de la tarde, más reducido en alumnos, y fluíamos con mucha facilidad. Fue, juntamente con otros años de estudiante de la asignatura "Ética" (en el instituto), la única experiencia sin exámenes. Eso sí, redacciones... "a porrillo", como decimos popularmente.

Finalmente también exponíamos trabajos, de libre selección, y que tuvieran relación con el eje del curso: los tres pilares de la Ilustración (libertad, igualdad y fraternidad).

Al final, la maestra asignó a cada uno la nota. Me lo pasé muy bien en esas clases y me gustó mucho el método. Nos movíamos con sensación de libertad. Además, ella era de pensamiento abierto y tenía un interés especial por la antropología y por la sociedad en que vivía, sin por ello renunciar a sus principios.

Un ejemplo así, más o menos, es como me parece que irán las clases actuales y del futuro. Se trata de una educación centrada en una organización creativa, muy en línea de la psicología humanista (por ejemplo, el modelo de enseñanza que promovía Carl Rogers, centrada en el estudiante y en la relación interactiva entre estudiante y maestro). Me gusta.

Lluís Barberà i Guillem
Maestro de primaria y de personas adultas